BIENVENIDA

Bienvenidos a mi Blogs, y gracias por su visita

02 septiembre 2010

REGRESO.  BAÑOS - TENERIFE

Este verano ha sido corta la estancia en la Península, dos semanas repartidas entre Galicia, O Grove y Baños. Lugares tan distantes y diferentes.

O Grove, población marinera, playas preciosas y aguas heladas, puerto, lonja y mercado, que visitaba casi a diario para ver, sobre todo los puestos de pescado y mariscos, de una plasticidad y colorido maravillosos, y de precios, algunos, muy subidos, y es que el pescado es caro y el marisco mucho mas, el bullicio de la gente, el habla, el olor, la vista era una verdadera maravilla. Los quesos y las empanadas, de atún, berberechos, chipirones (no era época de la lamprea, que dicen es una de las mas exquisitas), los vinos caseros y los aguardientes; los pimientos de Padrón, que “unos pican y otros también”, pero que están deliciosos. Manjar que trajeron los franciscanos desde Méjico. El albariño y el  ribeiro; la papa muy rica, el mejillón barato y fresco, recién sacado de la Ría, almejas, navajas , las sardinas del Norte y otras muchas exquisiteces.

Los percebes sabrosísimos y caros de 80 a 40 euros el Kilo, según tamaño, en la despedida nos dimos una pequeña mariscada.

Baños, con su sequedad y calor; el Tamujoso como nunca, de aguas claras, cálidas, y para poder nadar y nadar.

Las uvas blancas moscatel y las negras, los higos, de leche le llaman en Canarias, para distinguirlos de los Higos picos, los chumbos nuestros, el calor, el no poder salir a la calle hasta la tarde-noche, y la cervecita helada a cualquier hora.

Me encontré con la noticia del rodaje de la película “El Capitán Trueno y el Santo Grial”. El día 23, lunes fue muy intenso, había llegado la noche anterior, saludos, vueltas por el pueblo, y por la tarde el casting, con muchos cientos de personas en la plaza. Inauguramos los baños por la tarde.

El 30 ya de despedidas, preparar las cosas, bajar a la Cooperativa, el aceite de Baños está muy presente en Tenerife, y el 31 a Madrid en coche y al rato avión y de nuevo Santa Cruz de Tenerife.
Siempre al regresar siente uno cierta congoja, sobre todo por dejar a mi madre tan mayor, pero así es la vida. Volveré cuando pueda, pero siempre está uno pensando en el pueblo, en la familia y en sus gentes.
DMC